En este artículo te traigo el segundo vídeo del entrenamiento: ADIÓS ESTRÉS
Si te has incorporado esta semana al entrenamiento te dejo el link a los videos anteriores aquí:

Presentación del entrenamiento
Vídeo 1 del entrenamiento

En el vídeo anterior vimos los pasos para respirar de forma consciente y aprovechar la técnica más efectiva que existe contra el estrés, la gestión emocional y mental… y que absolutamente todo el mundo puede utilizar en cualquier momento.

Pues bien, Ya tienes una técnica que te va a permitir disminuir tu nivel de estrés tanto en general como en momentos puntuales.

A partir de esta semana además de continuar realizando el ejercicio de la respiración consciente lo que vamos a empezar a hacer es identificar esos patrones mentales que te llevan a generar ansiedad, estrés, que te llevan a la necesidad de querer llegar a todo, y que te hace entrar en una constante sensación de insatisfacción.

Y vamos a empezar por uno de los patrones mentales que más daño nos hace:
¡Nuestros propios juicios!

Esta semana vamos a empezar por cuestionarnos nuestros pensamientos, nuestras creencias, nuestros juicios. Vas a tener que estar atenta/o a cada uno de los juicios que emites y cuestionarlos.
Para ello te voy a pedir que identifiques esos pensamientos que te generan estrés, o una actitud negativa, te voy a pedir que identifiques esas creencias… y las pongas en duda, que cuestiones si realmente lo que piensas es totalmente así, o es posible que haya otras posibilidades…

Te vas a dar cuenta que nos pasamos el día emitiendo juicios por casi todo. En la gran mayoría de nuestros pensamientos emitimos juicios, y lo peor es que no nos damos cuenta pero estos juicios nos predisponen a ciertas actitudes y comportamientos que muchas veces nos generan malestar.

Quizá te pilles pensando o diciendo en voz alta:

“Ufff no he terminado ese trabajo a tiempo, soy un desastre”

Ok! Coge tu juicio y cuestiónalo: ¿Seguro que soy un desastre?… ¿nunca hago nada a tiempo?… ¿es posible que me hayan surgido imprevistos?… ¿es posible que haya exigido demasiado a mi agenda?…

Ponlo en duda ese juicio y deja de machacarte… elimina el juicio y describe solo la situación, quitando tus juicios de esa situación.

“¡No he terminado ese trabajo a tiempo pues ya está!… lo voy a hacer ahora o mañana lo haré… o cuando quieras.”

“Precisamente hoy que tengo un mal día mi hijo está insoportable”.

¿Seguro que tienes un mal día?… ¿es un mal día o solo has tenido un día en el que no te han salido las cosas como tú has imaginado que debían salir?

¿Tu hijo esta insoportable? ¿Es posible que sea la sensación que tengo yo al no haber podido ni sentarme 5 minutos hoy a descansar y me molesta todo lo que hace mi hijo?

En cada una de esas frases hay uno o dos juicios que son de nuestra cosecha.

El reto de esta semana consiste en observarte.

Se trata de descubrir qué tipo de juicios sueles hacer

¿A quién sueles juzgar? ¿A ti? ¿A tus hijos? ¿A tu pareja? ¿Suelen ser juicios negativos los que emites?

Si te paras e intentas conectar con la actitud que te genera cada frase te darás cuenta que muchos de estos juicios no hacen más que generarte malestar innecesario en muchísimas ocasiones.

Estos juicios aparentemente inofensivos generan una serie de químicos en nuestro cerebro que automáticamente pasan al resto de nuestro cuerpo y nos hace sentir verdaderamente mal.

Y evitar muchos de esos juicios depende únicamente de ti.

Cuando te observes emitiendo uno, realiza 3 respiraciones profundas y pon tu juicio en duda. Busca razones por las que quizá no sea como tú crees que es y modifica tu pensamiento, como mínimo por uno imparcial, por un pensamiento objetivo, sin juicio, sin carga negativa, un pensamiento que no inicie esa generación de químicos.

Observa y describe las cosas a modo robot, sin meter juicios o valoraciones subjetivas de por medio… No se trata de no sentir, pero describir las cosas desde la imparcialidad te ayudará a darte cuenta cómo esos juicios modifican tus emociones y muchas veces te hacen sentir verdaderamente mal.

Trata de atrapar tus juicios y si te pillas juzgando… no tomes tu juicio como verdad absoluta, Coger ese juicio y ponlo en duda y adopta una postura imparcial.

Solo podrás cambiar este patrón mental de emitir juicios negativos que no te llevan a ningún sitio, realizando estos 4 pasos:

1º identificando esos juicios. y para ello la respiración consciente te va a ayudar mucho ya que nos ayuda a pasar del modo automático en el que hacemos las cosas sin darnos cuenta al modo observador, donde seremos capaces de identificar muchos de nuestros pensamientos inconscientes.

2º Ponerlos en duda, cuestionar ¿ese pensamiento que acabas de emitir o esa afirmación que acabas de hacer es totalmente cierta o es posible que no sea 100 % así?

3º Cambiar de forma consciente, forzada, tu pensamiento o afirmación por un nuevo pensamiento o afirmación imparcial, sin emitir ningún juicio de por medio. ¡Acuérdate del modo robot!

Y 4º ser constante, continuar haciendo los 3 pasos anteriores hasta que lo integres por completo y lo hagas de forma automática… y este es un proceso que necesita de tu empeño y constancia… por eso he querido hacer este entrenamiento semanal y no diario… para que vayas integrando esta habilidad de no dejarte llevar por tus juicio negativos.

Así que a empezar a identificar juicios…

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Nos vemos la próxima semana.
Un beso,

Nuria Andreu.